A veces nos preguntamos, ¿qué hice para padecer esto?, o ¿por qué tenía que hacerme esto Dios? Aquí hay una explicación maravillosa.
Una hija le cuenta a su madre cómo todo está mal, está reprobando álgebra, su novio cortó con ella y su mejor amiga se está cambiando de ciudad.
Mientras, su mamá está preparando un pastel y le pregunta a su hija que si quiere comer algo y la hija dice, «Claro mamá, me encanta tu pastel.»
«Ten, tómate este aceite,» le ofrece su madre. «Wácala» dice la hija. «¿Qué tal un par de huevos crudos?» «Qué asco, Mamá» «¿Entonces, quieres algo de harina? o ¿qué tal bicarbonato ?» «Mamá, todo eso es asqueroso».
A lo cual la madre responde:
«Sí, todas esas cosas parecen malas por si solas, pero cuando las unes de la manera adecuada, hacen un pastel maravillosamente delicioso.
Así trabaja Dios… Muchas veces nos preguntamos por qué nos permite pasar por tiempos tan malos y difíciles. Pero Dios sabe que cuándo pone todas estas cosas en su orden, siempre trabajan para bien. Sólo tenemos que confiar en Él y tarde o temprano, estas cosas harán algo maravilloso.
Dios está loco por ti. Te manda flores cada primavera y un amanecer cada mañana. Cuando quieres hablar, Él te escucha. Puede vivir en cualquier lugar del universo y escogió tu corazón.
Puede ser que la vida no sea la fiesta que imaginamos, pero ya que estamos aquí es mejor que bailemos…
Espero que tu día sea «un pedazo de pastel».