2 o 3 huevos para la tortilla francesa (depende del tamaño del huevo)
3 lonchas de jamón cocido gruesas
1 zanahoria grande
100 g. de guisantes
50 g. de brotes de soja
Aceite de oliva virgen extra suave o aceite de girasol
Sal (al gusto de cada casa)
Salsa de soja (acompañamiento)
Preparación del arroz frito o salteado al estilo cantonés
Ponemos un cazo con agua a calentar, cuando hierva añadimos la zanahoria en trocitos no muy grandes. También los guisantes frescos (si como yo usas guisante fino de lata, no sería necesario cocerlos). Añadimos una pizca de sal y dejamos cocer durante 10-12 minutos. Reservamos.
Para realizar este plato hemos optado por un arroz de grano redondo que nos ayude a controlar la receta sin problemas. Ponemos un litro de agua a hervir en una cazuela y cuando esté hirviendo añadimos el arroz y media cuchara pequeña de sal.
Removemos de vez en cuando y probamos pasados unos 12 minutos para ver la consistencia del arroz. Cuando esté casi hecho (debe quedar un un poco duro) es el momento de apartar del fuego.
Escurrimos en un colador con agua fría, así dejamos que se enfríe para detener su cocción y que quede el grano bien terso. Mientras se enfría, en una sartén grande doramos el jamón que previamente hemos cortado en tiras no muy grandes. Debe hacerse a fuego fuerte para que se dore pronto, con un minuto es más que suficiente.
Preparación de la tortilla y gambas del arroz frito al estilo cantonés
Preparamos una tortilla con los huevos, calentamos la sartén en la que hemos salteado el jamón con 1 cucharada de aceite. Batimos los huevos con una pizca de sal. Cuando el aceite esté caliente vertemos el huevo batido. Solo hay que cubrir el fondo de la sartén, debe de quedar bastante fina. Cuando esté lista la sacamos del fuego y cortamos en tiras muy finas. Reservamos.
Cocemos ligeramente las gambas hasta que cambien de color en el agua en el que hemos cocido la zanahoria. Las pelamos y salteamos en una sartén con poco aceite. Echamos en la misma sartén el arroz que tenemos reservado y removemos un minuto. Solo nos queda añadir el resto de ingredientes, podéis incluir brotes de soja.
A mí gusta el toque crujiente que le da al arroz. Por último rectificamos de sal y servimos bien caliente acompañado de la salsa de soja. Qué cada uno/a le ponga la cantidad que le guste, aunque recordad que la receta ya lleva sal.