Un alto número de niños que recibe medicamentos para el tratamiento de la fiebre podría no estar necesitándolo, así lo indicó la más reciente encuesta nacional sobre la salud infantil del Hospital C.S Mott de Michigan, la cual concluyó que uno de cada tres padres les administra a sus hijos fármacos cuando tienen temperaturas inferiores a los 100.4 grados fahrenheit o 38 celsius.

Según los pediatras, la fiebre o calentura ocurre cuando la temperatura corporal supera los 100,4 grados, para lo que recomiendan principalmente el acetaminofeno o ibuprofeno

El sondeo de 1.376 padres de niños de menos de 12 años realizado a mediados del 2022 también encontró que el 84% vuelve a tomar la temperatura antes de dar una segunda dosis, pero el 26% de los consultados administra otra incluso sin haber temperatura alta.

Para el doctor Edgar Navarro, pediatra de Harbor Health, los resultados de este estudio refieren la necesidad de cambiar la perspectiva sobre la fiebre y el uso prematuro de antipirético, "Nuestro cuerpo está tratando de combatir una infección, de allí la importancia de que la fiebre siga su curso, no saltar inmediatamente a tratar de controlarla porque en ocasiones cuando damos un medicamento podemos ocultar o enmascarar otros síntomas que nos dan una mejor idea de que es lo que está pasando con el niño", explicó.

Para los padres la prioridad es velar siempre por la salud de sus hijos, tal es el caso de Jaki Obando, una madre cuya hija tienes 11 años: “Lo primero que hago es tomarle la temperatura, si esta menor de 100 espero, espero, si se pasa de los 100 ya 100 / 100,1 ya ahora si recurro al medicamento”

Aunque Navarro atribuyó este uso desmedido de los antipiréticos al temor que muchos padres sienten de ver regresar la fiebre, también advirtió que su uso excesivo tiene riesgos como la sobredosis: "Puede disminuir la temperatura más de lo normal y una temperatura baja e inferior a lo que es estándar si puede afectar el desarrollo del niño, puede afectar algún órgano clave verdad, el hígado, el corazón, los pulmones".

En este sentido Nayelis Rodríguez, quien tiene una bebé de 9 meses, explicó por qué no recurre al fármaco como primera opción: "Me da miedo porque está bien chiquita para tomarse muchos medicamentos y nada mas trato de hacerlo natural".

Y esta es precisamente la recomendación del doctor Navarro un método natural para tratar la fiebre en primera instancia, así como llevar un registro horario del monitoreo de la temperatura y después de esto considerar dar el medicamento. “Un trapo mojado, fresco que se puede poner en el cuerpo, en la frente, en el pecho, en la espalda en las piernas, que el cuarto en el que este el niño o la niña este un poquito más fresco, disminuir la cantidad de ropa que está portando, mantener a los nenes bien hidratados”, dijo el pediatra, quien además explicó que la mayoría de las veces la fiebre desaparece en un lapso de 24 horas, pero que de llegar a persistir será necesaria una evaluación médica.

Para obtener una medición precisa de la temperatura, Navarro dijo recomendar la vía rectal u oral, “Medir la temperatura un par de ocasiones, para ver si hay alguna diferencia entre la primer y la segunda toma de la medida, si hay una gran diferencia entre una y otra toma de la temperatura entonces es utilizar otro método”, concluyó.

Fuente: www.telemundoaustin.com
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