Con la llegada del Año Nuevo entró en vigor la ley estatal SB-12, la cual implementa importantes reformas al financiamiento de la educación pública mediante la imposición de límites al cobro de impuestos a la propiedad a las personas con discapacidades y adultos mayores.
Según explicó el Senador Estatal Paul Bettencourt, la nueva ley busca limitar la cantidad de impuestos que los Distritos Escolares cobran a ciertas personas con ingreso fijo: “Descongela el valor congelado y luego lo reduce cada año que tenemos lo que se llama compresión en las tasas de impuestos escolares, o las tasas de impuestos escolares bajan año tras año. Entonces, los mayores de 65 años obtendrán el beneficio de la compresión”.
El legislador considero esta medida como justa y un alivio para los contribuyentes: "La buena noticia es que, a partir de los 65 años, en realidad comenzaremos a ver que sus facturas de impuestos bajan, no solo se mantienen iguales todos los años".
La abogada en derecho educativo Catharine Michael consideró que la nueva disposición resuelve las deficiencias de una ley que data del 2019 y que excluyó a los adultos mayores y personas con discapacidades de ciertos límites a este gravamen: “El cambio no va a ser dramático para los distritos escolares. Si tienen un déficit debido a algunos cambios en sus comunidades por la entrada de menos impuestos a la propiedad, en realidad ellos pueden todavía solicitar al estado parte de esos fondos en exceso".
Sin embargo, el cambio recibió críticas de Ken Zarifis, presidente de Educación Austin, el sindicato que agrupa a los educadores de Austin ISD, quien destacó que conseguir las mejoras que necesitan las escuelas no se puede lograr con una reducción de los ingresos: “Este estado tiene miles de millones de dólares en ahorros y parte de eso se debe a la redistribución de Austin, y debiéramos poder acceder a esos dólares para ayudar a nuestros hijos. Cuanto más recortan los impuestos y piensan que son héroes, y lo son para muy pocas personas, están lastimando a nuestros hijos".
En la sesión que comienza el próximo martes, la Legislatura de Texas planea abordar más de 800 proyectos de ley, los caules incluyen variaos relacionados con fondos para la educación pública, como uno que calcularía el monto que designa el estado con base en la matrícula promedio en el año académico y otra que elevaría la cantidad básica por estudiante a $7.075 dólares por año.
Fuente: www.telemundoaustin.com